Preparar a un adolescente para conducir significa más que recopilar información sobre seguros de auto para adolescentes y las tarifas correspondientes de una póliza de tu compañía de seguros. También significa prepararlos para salir a la calle por cuenta propia y que tú puedas sentirte tranquilo.
En el caso de los conductores adolescentes, todo es nuevo y debe ser aprendido, desde cómo ajustar los espejos y encender los limpiaparabrisas hasta cómo lidiar con los puntos ciegos. Enseñar a conducir a los adolescentes de manera adecuada y segura requiere tiempo y paciencia. Sin embargo, hacerlo desde el principio los ayudará a estar mejor preparados para su futuro en la carretera y ayudará a evitar accidentes.
Todos quieren tener tarifas de seguro de auto baratas. Un factor clave para que esto suceda es reducir la cantidad de incidentes en las calles o carreteras. Los adolescentes normalmente no califican para muchos descuentos que les permitan mantener sus primas bajas.
Preparar a los conductores adolescentes para los peligros que pueden enfrentar mientras manejan y procurar que adquieran mucha experiencia detrás del volante los ayudará a mantenerse fuera de peligro.
Conducir no es tan fácil como parece. La cantidad de habilidades y conciencia que debe adquirir y aplicar un nuevo conductor es considerable. Algunas de las cosas más importantes a las que se les debe prestar atención son:
Señales de tránsito y condiciones del camino
Velocidad
Clima
Otros conductores
Manejo del vehículo
Peatones y animales
Los padres deben repasar estos temas con sus hijos adolescentes incluso antes de que empiecen a conducir. Hay que explicarle a tus hijos los riesgos de accidente que implica cada una de estas situaciones y cómo actuar frente a ellas. Cuando salgan a practicar, tómate el tiempo de señalar estos riesgos y de repasar lo que han platicado.
Para algunos adolescentes conducir no resulta natural. Aprender a manejar es mejor con la ayuda de un conductor experimentado. Hay muchas cosas sencillas que puedes hacer para ayudar a los conductores adolescentes:
Da un buen ejemplo: Tu hijo adolescente te está observando y registrando tus hábitos de manejo. Desde la primera vez que lo pusiste en su asiento de bebé hasta que viajó en el asiento delantero contigo, ha observado como manejas las distracciones al conducir (llamadas telefónicas o mensajes de texto), el uso del cinturón de seguridad, la velocidad a la que manejas y tu actitud al manejar, ya sea agresiva o pasiva. Al demostrar buenos hábitos de manejo, estableces una base de manejo adecuada para tu hijo adolescente.
Ensaya situaciones de manejo: Habla con tu adolescente sobre diferentes situaciones de manejo y cómo reaccionar de la manera adecuada. Tu adolescente estará mejor preparado para lidiar con situaciones difíciles si le llegan a suceder. Practiquen diferentes escenarios para ensayar situaciones de manejo.
Práctica, práctica, práctica: Una de las mejores cosas que puedes hacer por tu nuevo conductor es regalarle tu tiempo y tu experiencia práctica del manejo de un vehículo. A menudo, es más probable que los conductores tentativos o indecisos se vean involucrados en accidentes de automóvil. Pasar tiempo con tu hijo adolescente lo ayudará a desarrollar su aptitud y confianza para conducir.
Inscribe a tu hijo adolescente en un curso de educación para conductores: Aunque puedes practicar con tu hijo adolescente y enseñarle todo lo que sabes sobre cómo manejar, también hay cursos valiosos en los cuales puede inscribir a tu conductor adolescente. Los cursos de manejo son impartidos por instructores para brindar una experiencia más real y ofrecer consejos desde otro punto de vista. En algunos casos, incluso podrías recibir un descuento por haber tomado un curso de seguridad para conductores.
Aunque parezca lo contrario, las compañías de seguros no tienen un prejuicio en contra de los conductores adolescentes. Las tarifas están basadas en datos (cantidad de accidentes, etc.), no en los años de experiencia de manejo. Las compañías de seguros tienen décadas de datos que usan para hacer un seguimiento de las tendencias y, a su vez, determinar las tarifas de la cobertura.
Entonces, ¿que muestran las tendencias? Con menos experiencia detrás del volante, los conductores más jóvenes son más propensos a tener accidentes de automóvil y a conducir de forma imprudente.
Además, los conductores más jóvenes no suelen tener un historial financiero suficiente para definir su calificación de seguro o, si lo tienen, en general, es una calificación baja que afecta su calificación de seguro de forma negativa. Cuanto más baja sea la calificación de seguro, mayor será la prima del seguro.
El momento en el que los adolescentes comienzan a conducir puede ser estresante. Sin embargo, con preparación, práctica y paciencia, puede ser una experiencia gratificante para todos.